Cierre de la sucursal del Banco Córdoba en barrio Sarmiento: no habrá despidos ni pérdida de puestos de trabajo

El dirigente recordó que la ciudad históricamente contó con tres sucursales y que recientemente se inauguró una nueva sede de Bancor en el Parque Industrial. Señaló además que gran parte de la operatoria que antes se realizaba en barrio Sarmiento ya había sido centralizada con anterioridad en otras dependencias, por lo que en el último tiempo allí se desarrollaban principalmente tareas vinculadas a cobros y pagos, mientras que los trámites de créditos y tarjetas se canalizaban en las sucursales Centro y Urquiza. En este escenario, desde el gremio solicitaron que, pese al cierre, se mantengan los cajeros automáticos en el barrio, debido al intenso uso que tienen y al rol social que cumplen para los vecinos.

Uno de los puntos que generó mayor preocupación fue la situación laboral de los trabajadores. Sobre este aspecto, Quaglino dejó en claro que actualmente se desempeñan cuatro empleados en esa sucursal y enfatizó que no habrá despidos ni pérdida de puestos laborales. Explicó que todos los trabajadores serán reubicados entre las sucursales Centro y Oeste, aunque aún restan detalles de organización interna por definirse. Remarcó que la preservación del empleo es una prioridad para el sindicato.

Respecto a los plazos, indicó que el proceso de cierre ya está en marcha y que los clientes están siendo informados. Se estima que la transición demandará alrededor de 60 días y culminaría hacia fines de febrero, momento en el cual la dependencia quedaría operativa únicamente con cajeros automáticos, siempre en caso de concretarse el pedido del gremio.

Quaglino también aclaró versiones que circulaban sobre la sucursal del Banco Macro en avenida Urquiza, señalando que se trataría de una reestructuración de formato de atención y no de un cierre definitivo. Explicó que se proyecta un nuevo esquema en el Sport Automóvil Club, con parte del personal trasladado a la sede céntrica, manteniendo allí atención sin caja y con cajeros automáticos.

El dirigente advirtió que este tipo de procesos impacta con mayor fuerza en comunidades pequeñas, donde el retiro de una sucursal bancaria implica dificultades para jubilados y trabajadores que deben trasladarse a otras ciudades. Por ello, sostuvo que el gremio trabaja junto a intendentes y autoridades locales para evitar cierres en otras localidades y para sostener la atención presencial, especialmente para los adultos mayores, subrayando que la tecnología no reemplaza la importancia del trato humano.

Finalmente, al realizar un balance del año, Quaglino reiteró la postura crítica del gremio frente a reformas impulsadas a nivel nacional y provincial, al considerar que retroceden en derechos laborales y previsionales. Aseguró que la seccional continuará defendiendo las fuentes de trabajo durante 2026, reafirmando que el principal objetivo es proteger el empleo de los bancarios.